domingo, 15 de mayo de 2016

Recopilación de detalles (colgados) del día a día

25/04
-Pensé que ojalá nos regalaran comida y a los 10 minutos nos regalaron unas galletitas de chips de chocolate.
-Vi un Michael Jackson bailando en la calle. Pienso que eso me pasa más seguido de lo que cualquiera imaginaría.

29/04
-Le toqué la cola a Fran en el super y una señora en voz alta y muy sorprendida iba diciendo ''Mira, mira, esa chica le agarró su trasero''. No nos paramos de reír de eso hasta el día de hoy.

30/04
-Nos regalaron una caja con patitas de pollo, papas fritas y empanadas.
-También una señora a la que todos los días le comprabamos Sopaipilla nos regalo empanadas de queso y sopaipilla porque nos vio con las mochilas.
-Un señor se paro en el faro para agradecernos por lo que hacemos, de regalar un poco de sonrisas, y también nos comentó sobre lo amargadas que son las personas que no pueden apreciar ni agradecer, ni detenerse a ver, 30 segundos de arte (así fueron sus palabras).

01/05
-Volvimos a Antofagasta, fuimos al mercado de pulgas y a la feria del libro. Fue un día llenisimo de colores.

02/05
-Hoy dejé de comer carne.

03/05
-Fuimos al centro temprano y nos encontramos con unas señoras mayores de 65 bailando charleston en la plaza. Fue extremadamente tierno.

04/05
-Vi una rata y aunque no me gustó me di cuenta que no les tengo el miedo que creí que les tenía.
-Por primera vez cociné sin probar la comida y quedó INCREÍBLE.

12/05
-¡Aguante estar vivo! Un señor de 71 nos vino a hablar, para contagiarnos un poco de su vitalidad creo yo. Nos contó que anda casi todos los días en rollers, nos mostró que salió en el diario local por eso, nos dijo que también se fuma de vez en cuando un cuete (así nos dijo) o le pone al mate un poco de marihuana y después sale a dar vueltas y la gente comentando "Miren a ese abuelito lo rápido que va". Y lo principal, lo más importante, nos dijo que la edad es una mentira, es un número, el tiene en realidad 25 años y por eso tiene la energía que tiene. Lo amé mucho.
También hacía unos boomerangs MUY LINDOS, con dibujos de extraterrestres.
Aprovechamos la buena onda, no trabajamos y nos fuimos a jugar.




filosofía barata.

La felicidad es una elección. Es una elección por la cual se debe luchar.
Cómo la libertad. A veces creo que la felicidad y la libertad son casi lo mismo.
En este mundo es libre quién lucha.

lunes, 2 de mayo de 2016

Copiapó

Datos del lugar:
-Es donde pasó lo de los 33 mineros.

-Tiene un  río que la atraviesa y está seco, pero seco seco. Es demasiado desierto.

-De lo que conocí, me pareció la ciudad más limpia del norte.

Cosas que vi:
Es gris, ya todo el norte de Chile me parece gris, aunque sea bien soleado. El desierto es desierto. Si prestas atención hay clubes nocturnos por todos lados. Es como es porque es una ciudad minera.
Si se va a trabajar haciendo malabares sale la plata como en ningún otro lugar del norte, pero hay que ir preparado para cagarse de aburrimiento. Nuestro tiempo en Copiapó se dividió entre trabajar, ver televisión en el hotel y buscar un buen plato de comida, el cual nunca encontramos. Comer es caro y difícil de encontrar algo abundante a precio accesible para el presupuesto que manejamos.
Si no es para juntar plata no le recomendaría a nadie que vaya mucho más de medio día a Copiapó, y ese medio día que sea solamente para tomarse un bus a Bahia Inglesa, que aunque no fui, (porque si bien no es muy caro, estamos intentando ahorrar) se que es como un cachito de Caribe puesto en el culo del mundo.


No se que tendrá que ver lo de los mineros con la paz mundial, pero China le regalo está estatua a Copiapó cuando rescataron a los tipos.


Atardecer en el faro.

A saber

Los planes siempre, siempre (pero de verdad, siempre) pueden cambiar.
Eso también tiene su rutina.

Pensamiento rápido V.

Que no queden dudas, la alegría es Latinoamericana.
Que no nos la quiten.

Pensamiento rápido IV.

Me pregunto como llegue a dudar que se podía vivir del arte. No sólo se puede, creo que se debe.

Pensamiento rápido III.

A veces (bastante seguido) siento que paso la vida adentro de terminales.

Pensamiento rápido II.

Las duchas en casas son re diferentes a las duchas en hoteles con baños compartidos.
Bañarse en una casa es hermosamente cómodo, te sentís más limpio.

Pensamiento rápido I.

A veces siento que soy Bart Simpson. Siempre con la misma ropa, short y remera.

miércoles, 20 de abril de 2016

Antofagasta.

Pensamientos cortos:
No me extraña que Jodorowsky sea de por aquí.

Datos contados por gente del lugar:
-El lugar con más suicidios en Chile (!)
-También es el lugar de Chile con más casos de cáncer. ¿Será porque es una ciudad industrial?
-El 70% de la población no es de acá y lleva sólo una generación (o menos) aquí.

Cosas que pienso:
Es sucio, pero todos los lugares que conozco me parecen bastante sucios. Me estoy dando cuenta que las ciudades costeras están un poco disfrazadas. Tiene lugares que me parecen lindos, pero también me parece gris (y es desierto, con mucho sol) y hay demasiadas fábricas.
Hay miles de grafitis, es una de las ciudad con mas grafitis que conocí.
No es el lugar más lindo que conocí, pero tampoco me parece el más feo. Creo que me gusta porque estoy cómoda, y porque retome la escritura. Pasa que antofagasta es el primer lugar en el que no pago alojamiento en dos meses y medio de trabajar sólo para dormir y comer y entonces eso me relaja. Y estoy cómoda. Era necesario despejar la cabeza.
Me voy de acá agradecida, acá despejé todo lo que necesitaba para acomodar todas las ideas con las que andaba en la cabeza y empezar al fin a plasmarlas.

Algún que otro dato útil:
-Es la ciudad más cara de Chile.
Para alojarse es recomendable usar Couchsurfing para si se pasa por acá ahorrar unos pesos en alojamiento.
Para comer hay muchos restaurantes rápidos de comida peruana que son buenos, bonito y baratos. Como se le dice en Chile, un lugar de picada, las tres B.
-Si venis a trabajar en la calle, dicen que haciendo música en los buses va bastante bien pero que la gente y los choferes andan medio cansados de los músicos callejeros.
Si haces faro, hay algunos sobre la avenida Argentina. Igual es cuestión de caminar, y buscar lo que a uno le sea cómodo, porque es una ciudad pensada en industria y en autos, entonces el rojo dura poco segundos y el verde es interminable. Camine señora, camine.



Un grafiti flashero
Pelícanos durmiendo siesta.
El mar que se ve lindo en foto, pero medio contaminado en la vida real.
Otro grafito flashero.


Recopilación de detalles del día a día.

12/04/2016
-Hice dedo en el desierto por primera vez. No nos levantaron y después nos enteramos que habíamos estado haciendo dedo todo el día en la ruta incorrecta.
-Una cholita haciendo dedo pasó y me dijo que tenía los dientes como choclo de tan bien que vio mi dentadura.

13/04/2016
-Franco encontró un carrito de supermercado abandonado y anduvimos todo el día con el carrito cargando con nuestras mochilas por toda la ciudad de Antofagasta.

14/04/2016
-Hice música electrónica, jugando con los sonidos del teclado, con Franco tocando el clarinete y Manuel la guitarra.

15/04/2016
-Caminando por la calle nos encontramos con un teatro donde estaba tocando la Filarmónica de Antofagasta gratis.

16/04/2016
-Vimos un ruedo con número de circo en una plaza. Me ayudó a resolver ideas desordenadas en mi cabeza para poder arrancar con nuestro propio ruedo.

17/04/2016
-Franco me puso un papel entre los rulos para ver cuánto tiempo se quedaba ahí sin caerse. Dormí con el papel y me desperté y seguía con el coso ahí. Lo confirmó: mis rulos son un excelente lugar para que un pájaro arme un nido.

19/04/2016
-Un día gris en el desierto y rutinario, pero  caminando vi fideos crudos tirados y los pise y baile sobre ellos como si fueran ojas secas de un otoño que acá no existe.

Escribo porque me encanta.
En esta vida, donde todos los días aprendo algo nuevo, deje de creer en las casualidades. Las cosas pasan porque pasan. No es casualidad que vuelva a escribir en esta ciudad, ni en estos días, ni con estos ánimos de energía nueva.
Escribo porque me conozco escribiendo. Porque aprendo más de mi, me veo a mi misma más que con ningún otra cosa. Me escucho, me comprendo.
También escribo porque me hace apreciar todo más, veo más, escucho más y pienso más. Le pongo atención a los detalles e intento convertir todo en instantes que siento que merecen ser narrados.
Lo hago porque me hace bien al alma, al ser. Lo hago también para calmar los dolores del alma y del ser. Lo hago para recordar y también lo hago para olvidar. Escribo para que mis pensamientos me dejen y escribo para que mis palabras me acompañen.
Escribo desde que tengo memoria y desde antes también. Sin embargo, no soy escritora, no soy poeta y nunca lo seré. Pero escribo. Porque es lo que soy, lo que fui y lo que seré.

martes, 19 de abril de 2016

Arranca acá.

No cambio está vida por nada del mundo.

Vivir viajando no es fácil. Claro que pienso que nada en la vida lo es. Pero elegir vivir viajando es intenso, es estar dispuesto a vivir al 1000%, adaptarse a lo que tengas adaptar, y creeme, a veces cuesta el contexto al cual adaptarse.

Vivir viajando es elegir como ganarse la plata que te ayuda a seguir en movimiento, porque viajar no es gratis.
Podes elegir hacer arte callejero (o que te toque, como considero que me paso a mi), elegir exponerte con lo que haces. Es ganarte la plata luchando el día a día, como todos, pero dependiendo de la colaboración ajena. Es aceptar opiniones que no te van a gustar, puteadas a veces, caras de culo, "anda a laburar, vaga", y también fumarse secuencias, soportar autos que te quieren pasar por encima porque no desean ver un payaso en el semáforo.
Pero también es recibir miles de sonrisas, agradecimientos de todo tipo y formas (últimamente nos han regalado bastante chocolate), y un montón de  saludos de niños encantados de ver un poco de circo en la calle.

Vivir viajando no es cómodo. Es que te toque andar varios días, aunque no lo quieras, con la misma ropa, sucio, comiendo mal, sin plata, durmiendo en lugares feos que encima tenés que pagar, camas incómodas y a veces sucias. Es desear mucho un baño caliente y no encontrar más que duchas frías en lugares que la temperatura máxima es de 7 grados. Es querer un plato de comida casera y es tener que conformarse con un pan durante un rato.
Pero también es que te toquen lugares increíblemente cómodos en todo sentido. Lugares donde logras descansar todo lo que necesitas, donde te podés cocinar o incluso te invitan la comida, ¡lugares donde podés lavar la ropa en un lavarropas! Lo que menos me gusta de viajar es lavar tanto la ropa a mano. Lugares donde te reciben amigos, lugares donde te haces amigos, lugares mágicos, con ese "que se yo" que hacen que estés como en tu casa aunque estes a miles de kilómetros.

Vivir viajando es adaptarse, a lo que te toca, a lo que elegís, a los aciertos en decisiones tomadas y a los errores.
Es que te toque hacer dedo en el desierto durante todo el día y que nadie te levante, es preguntarte "¿qué mierda hago acá?" en más de una oportunidad.
Pero también es que te levanten, es que te ayuden, es que te pasen cosas buenas gracias a las cosas que no salen como lo planeado en primera instancia. Y es llegar a lugares alucinantes, que ni sabias que existían y es agradecer, constantemente, que bueno que estoy acá.

Vivir viajando es extrañar cosas de la vida que tenías antes de ser nómade. Momentos, instantes, lugares, personas.
Pero también es hacerte nuevos amigos, nuevos hermanos, nueva familia que va a llegar en el momento justo, en el momento que más lo anheles, y te van a dar ese abrazo que tanto necesitas, y vas a escuchar las palabras que quieras oír.

Vivir viajando te despierta la conciencia. Con lo bueno y lo malo que eso pueda significar. Te despierta la conciencia dormida entre tanto sistema capitalista y  amarillista. Tomar conciencia hace que necesites cambiar cosas de tu vida que necesitan ser cambiadas. Cosas externas y cosas internas.
Si tomas conciencia de cosas externas te vas a ver en la necesidad de cambiar como funcionan en vos tantos sistemas impuestos. Sistemas impuestos en alimentación, en educación, en medicina, en política, en religión, en cultura, etc, etc. Necesitas cambiar para que lo que haces vaya acorde a lo que pensas. A quien sos.
Es también querer cambiar el mundo, es darte cuenta que si no cambias vos, las cosas no cambian, y que si las cosas no cambian no le queda mucho (por no decir nada) tiempo a todo esto que conocemos. Es tener fe y esperanza de que si puede cambiar y también es entender que si no cambia también va a estar bien.
Y tomar conciencia de cosas internas es hacerte el mejor regalo que te podés hacer: es conocerte a vos mismo.
Es abrazarte. Es aceptarte, quererte, cagarte a pedos cuando es necesario. Es hacerte cargo de quien sos, quien fuiste y quien querés ser. Es hacerte cargo aunque cueste y duela. Es darte cuenta que la única salvación del ser es el arte.

Vivir viajando es hacer cosas que nunca creiste que ibas a  hacer, hacer cosas que no te creías capaz de hacer, es aceptar, es agradecer,  es ir más allá, es ir más adentro, es aprender todos los días, es escuchar, es callar, es hacer, es ser.

Vivir viajando no es fácil pero no cambio esta vida por nada del mundo.